¿Y A Tí?

Tómate tu tiempo para disfrutar de esto, vale la pena hacerlo.

(Mario Benedetti) Hasta siempre.

Normas

Veinticuatro años señores y señoras. Veinticuatro años me han hecho falta cumplir para empezar a aprender a vivir. Espero que se cumpla eso de que nunca es tarde si la dicha es buena. Así que compartiré con todos vosotros lo que he aprendido, reglas infalibles para que todo vaya ok.

1) Fluir. Cuando más te digan está comprobado que es mejor no contestar, no rechistar. Eso sí, mirada atenta como que todo lo que estás escuchando está calando pero no entrar al trapo. Es mucho mejor morderse el labio pero no hablar y si se habla que sea posteriormente a contar lo que tu organismo considere necesario para burlar un ataque de sabeDiosqué y hacerlo con toda la calma posible del mundo mundial.

2. Aconsejar. Aconsejar sí pero como un profesional, es decir, sin decir absolutamente nada de lo que yo haría, lo que me parece, lo que quiero o me gustaría. Nada de eso. Y todo ello por la sencilla y simple razón que pasados los días, semanas, meses e incluso años esa decisión inexplicablemente vuelve a caer sobre ti. Repito, inexplicablemente porque nadie te había dicho que tu opinión fuese tan sumamente importante pero por decir algo en un momento de tu vida no debes de pagar la condena el resto de los años que te quedan. Que digo yo, que no lo sé...

3. Compartir. Pero compartir midiendo, faltaría más. Nunca tienes problemas en general y eso es genial porque tienes mas tiempo para escuchar y ayudar a los demás pero, cuidadín, cuidadín, que cuando los tienes nadie tiene tiempo para escucharte, pese a que tu dejes todo por hacerlo con los demás pero nadie dijo que la amistad o el mero conocimiento de personas fuese a ser algo recíproco. Nadie leyó la letra pequeña siempre tan valiosa. ¡Ojo! Si te escuchan atentamente es porque probablemente algo quieren, pocos son los que superan esta dificultosa prueba del casting.

4. Educar a los de alrededor. Ya que a todo el mundo es un imposible, hacerlo con los que tengas más a mano, si es que puedes. Por si acaso, te deseo de todo corazón que la voluntad y la fuerza te acompañe. Es fundamental educar en actitudes, en el respeto y delimitar los espacios. Esto último es supermegaimportantísimo, que cada día está más caro el metro cuadrado.

5. Y por último y no menos valioso, valorar y cuidar tu propia libertad.

Corazonarras

El mercado emocional de primera mano se agota. Se acaba. Se extingue. Es un hecho. A estas alturas de la soledad, todos recurrimos a la segunda mano, repleta de corazones usados, maltratados, agrietados, a reformar, y eso cuando hay suerte y no están de derribo. Los habrá que opinen que ya no se construyen relaciones como las de antes, de materiales nobles y duraderos, con inmensos espacios sólo para dos. Pero lo cierto es que jóvenes y no tan jóvenes especulamos hoy en el compromiso, y eso hace que podamos encontrarnos con opciones para todos los gustos, colores y metros cuadrados. Hay corazones tamaño zulo, ideal parejas, con relaciones minimalistas o de diseño, y los hay muy pero que muy generosos, tipo loft, todo en el mismo espacio, normalmente a compartir entre varios inquilinos. Luego están los que quieren querer en zona tranquila, que suele ser sinónimo de aislada, de difícil acceso y normalmente muy comunicada, pero los que llegan a acostumbrarse aseguran que no la cambiarían por nada del mundo, menos ruido y menos contaminación. También hay amores pleno centro, siempre a pocos metros de cualquier cosa, con todo lo bueno y lo malo que eso conlleva. Aquí lo importante está en saber si son exteriores o interiores, porque eso determinará si les entra mucho sol o mucha sombra. Los corazones ático normalmente tienen buenas vistas, amplios horizontes y grandes terrazas con muchas estrellas, pero en este caso es vital que dispongan de un buen ascensor para poder poner frecuentemente los pies en el suelo. Y los que están más abajo son más oscuros, dicen que más seguros, aunque claro, con lo que grita el asfalto, es mucho más difícil oir las cosas que nos va contando el cielo, como, por ejemplo, si mañana saldrá el sol.

Qué más. Ah, sí. Algunos te los venden con inquilino, lo que pasa es que no te enteras hasta que te has metido hasta las trancas. Otros parece que están muy disponibles, pero es falso, en realidad sólo están esperando a que suba la cotización de su compromiso. Aparte de eso, siempre es bueno fijarse en dos cosas más. Primero, la calefacción, mejor natural, si no quieres congelarte el día que se vaya la eléctrica (que se irá, de tanto en tanto te aseguro que se va). Y segundo, si tiene o no trastero, ese espacio donde se almacenan las cosas que parece que ya no importan solo por el hecho de que no se utilizan.

Por último, mención especial merece la mudanza, ese proceso que, a medida que te haces mayor, cada vez da más pereza, porque siempre acabas perdiendo cosas que sólo echas de menos una vez ya que te has mudado. De todos modos, antes de empezar a mirar te recomiendo primero que decidas si quieres amar de compra o en alquiler. Las dos tienen sus pros y sus contras, no te voy a engañar. Si compras tendrás la falsa ilusión de que ese amor es tuyo y de nadie másm, mientras que si alquilas, con la excusa de que no es tuyo, jamás invertirás lo suficiente como para sentirte de verdad en casa. Da igual, hagas lo que hagas, ten la seguridad de que se va a cumplir la inefable ley que rige este mercado. Bajará tu interés, seguirá subiendo el precio de todo lo que desees, y cada vez se te hará más familiar esa incómoda sensación. La de estar hipotecado. Para siempre.

"El pensamiento negativo: acierta mal y pensarás.
Risto Mejide. Ed. Espasa"

PD: Increíblemente cierto, y tú... ¿compras o alquilas? ¿que tipo vivienda prefieres? ¿cual necesitas? Yo sigo apoyando fírmemente lo ecléctico... que se le va a hacer compañeros... Saluditos a todos/as,

Sin Temor

En el amor no hay temor,
sino que el perfecto amor echa fuera el temor;
porque el temor lleva en sí el castigo
de donde el que teme no ha sido perfeccionado en el amor.
Si el perfecto amor está dentro de ti, entonces,
en tu corazon o mente no puede existir el temor.

Pidiendo Deseos...

Un añito para aprender a andar sin saber el largo sendero que es la vida y para conocer a aquellas personas que siempre iban a caminar junto a mi, mis padres. Dos, para empezar a hacer no solo sonreir sino también reir, para crear ilusiones y llenar de vida otras vidas. Tres, para recibir las primeras órdenes, empezarlas a cumplir y a respetar. Cuatro, para empezar el cole y para irme relacionando con quienes aun mantengo contacto y presumo de modo compartido de mi primer mejor amiga de la infancia, Marta. Cinco, para reconocer las letras, los números e ir aprendiendo a leer y a escribir. Seis, para perfeccionar las muchas destrezas adquiridas y para desarrollar otras muchas más. Siete, para esperar a un nuevo miembro familiar, mi único hermano. Ocho, para entender que compartir es vivir. Nueve, para la primera comunión y el primer "beso de amor". Diez, para entender que nada es para siempre, que los que quieres también mueren y que la vida puede cambiarte en cuestión de unas simples horas. Once, para ser más madura de lo que toca y para convertirte en toda una mujer. Doce, para empezar a mirar a ese chico sin poderlo remediar. Trece, para iniciarte en eso llamado amor... y entender que has nacido para las letras y no para los complejos numeritos. Catorce, para empezar a tener claros tus principios y valores como persona. Quince, par saber a qué dedicar el resto de mis días, para empezar a soñar, para fijar objetivos a largo plazo y para trazar mis propios límites del día a día. Dieciseis, para tomar decisiones importantes y para enamorarme por primera vez. Diecisiete, para vivir solo por y para esa persona, regalándole lo mejor que habia en mi, creyendo que aquello sí que iba a ser eterno. Dieciocho, para comenzar una nueva etapa, sin ese amor o con él pero sin poder compartirlo, para coser y curar heridas, para conocer gente nueva, vivir sola en otra ciudad y fijar mis ojos en alguien más. Diecinueve, para aprender de todos los errores cometidos por mi buena fe, santa paciencia y comprensión. Veinte, para procesar la información de lo vivido y confirmar lo correcto decidido. Veintiuno, para enfrentarme al gran reto de opositar, conseguir grandes resultados y superarme a mi misma con creces, por recuperar a personas importantes y deshechar a las sobrantes. Veintidos, para creer que en esta vida todo no es trabajar duro sino también tener suerte, que las personas van y vienen y que la mejor de tus amigas siempre es y será la misma, tu madre. Veintitres, para vivir por primera vez una relación seria y aprender que algunas cosas no dependen de ti por mucho que hagas por salvarlas. Y venticuatro, para recoger lo que has sembrado en los años anteriores, para tomar decisiones verdaderamente importantes, para dejar lo que tanto te ha costado conseguir en busca de más objetivos que alcanzar, para proponerte ser feliz con lo que tienes y entender que las cosas pasan porque deben de pasar, que hay ciertas voluntades que nos toca aceptar y que lo que tengo hoy en día es el mejor de los regalos: mi familia, mis amigos y a ti... ¡GRACIAS por vivir conmigo!

Mujeres

¡Que vivan las mujeres que se atreven a vivir!

Vive

Pues no, ni lo quiero, ni lo puedo negar, ¡me encanta Malú! Es una de las mejores voces que tiene nuestro país. Tan solo tenemos que ver la trayectoria de esta mujer, que con solo 16 años se lanzó a una aventura de la cual sigue siendo partícipe. Ahora, tras once años después, cuenta con nueve discos que tan solo han sabido cosechar éxitos y dejar claro una cosa, su voz inigualable. E insisto que por preciosa e impecable que sea su voz en los discos de estudio, en directo gana muchísimo más, es ahí, en el escenario, donde se disipan las poquitas dudas que pueden quedar tras escucharla. Os animo a que si tenéis ocasión, ¡lo comprobéis! Acaba de sacar al mercado su noveno disco, “Vive”. Es un acierto hasta el título, pues para mi, personalmente, ha llegado en un momento donde si algo tengo claro es precisamente eso, ¡vivir! Sus canciones las siento casi mías y si os centráis en sus letras, como hace una servidora, es cuando más la escucháis cuanto más os gustará. Os dejo un popurrí de letras… ¡Espero que os guste tanto como a mi!

Podéis escucharlas en su web oficial:

“¿A esto le llamas amor? A lo que has hecho de mi, no puede ser esto amor si no haces más que mentir, ¿cómo le llamas amor y me miras a la cara? ¿A esto le llamas amor? Y tú ni cuenta te das que amar es cosa de dos y no tu sucia mitad, ¿cómo le llamas amor sin sentir esa palabra? Esto no puede ser amor, te engañas tú, me engaño yo”

“Si es lo que siempre has querido… y ahora sí que estoy contigo. ¿Qué mas te da si hoy ya no nos queda nada que salvar? Que siga con mi vida si al final te irás. ¿Qué importa ya? Tú siempre me decías que te daba igual, si más tarde o más temprano tiene que acabar, y ahora lo digo yo, ¿a ti que más te da? El tiempo cura y siembra distancia, dejad que ahora atienda a mi alma que ya no puedo darte sin tener compensación, si solo era un ave de paso, dame la llame y déjame espacio…”

¿Qué es lo que he hecho yo por creer que me amabas? Y no es incierto que perdí mi alma por hojas secas que has guardado dentro de tu corazón, para que esconderte más, siempre asoma la verdad…

Guárdate los restos que te queden hoy de mi, lo poco que pudiste conseguir, los besos que una vez tuvo tu boca, guárdate lo tanto o lo poco que te di que yo te guardaré lo que me toca. ¿Qué sabes tú? Si nunca te has dignado ni a querer y dando nada quieres que te quieran. Convéncete que por más que te lleves más se puede perder, que por mucho que corras el tiempo no borra y si tú no lo sabes, el pasado lejano, más tarde o más temprano te vuelve a coger".

Soñando...

Desde a “A pesar de todo” me han invitado a realizar el siguiente juego. Es tan sencillo como compartir con los lectores de mi blog 8 de mis sueños, pasar el relevo a otros 8 amigos o blogueros/as y avisarles de ello mediante un comentario.

Espero que os sirva para conocerme un poco más aunque no sé muy bien todavía ninguno de ellos pues desde hace tiempo empecé a aplicarme eso de hacer de mi vida un sueño… y trato de valorar como sueño cada cosa que hago y logro alcanzar.

1. Desde pequeñita siempre tenía claro una cosa que sonaba un poco estándar: “formar una familia”. Pues eso, me encantaría algún día poder estabilizarme con una persona que me aporte todo aquello que necesito, que reciba de mi tanto o más y que nos sea suficiente ese dar-recibir para ser felices en nuestro día a día. Y por supuesto, transmitir ese amor en nuestros hijos.

2. No sé si es más bien sueño o deseo, en caso de desear tanto una cosa como poderle llamar sueño, me lo tendréis que aceptar… Me encantaría que los míos (familia, mejores amistades…) gocen siempre de una salud aceptable. Este sin duda, sería el más importante de todos, porque es por ellos que sea lo que soy y porque sin ellos no seré la misma persona en ningún momento. La salud es lo fundamental, si la tienes, no necesitas nada más.

3. Me encantaría ser una persona valorada por mi competencia. Ser “mejor” en mi profesión, que se me quiera por lo que soy, por mi forma de hacer las cosas, por ser impecable aunque no sea del todo posible, pero intentarlo. Y esto sé que no es cuestión de sueños, sino de ir haciendo el camino andando que es lo que persigo desde hace varios años hasta la actualidad de hoy.

4. Que pese a todo, el afán de ambición no me pueda, y sea capaz de ser cada día un poquito más humilde, que los ascensos o expectativas solo sirvan para enriquecerme en lo personal sin dejar de lado el aspecto emocional y social.

5. Convertirme en la mejor mamá del mundo, hacerlo lo mejor posible con mis hijos/as, y si cometo errores, aprender constructivamente con ellos y no volverles a dar lugar en mi vida. Ser un referente al que admiren siempre.

6. Los que se han ido, por algo será. Pero los que quedan, guardarlos bajo llave, que por muchas vueltas que de la vida, por variopintas que sean las circunstancias que nos envuelven no se alejen ni salgan de mis vidas, que una de las cosas más tristes es pensar que para algunas personas tan solo eres un recuerdo. Yo quiero estar siempre ahí, ser capaz de demostrarlo y que lo estén para mi, un compromiso por parte de los dos, una amistad de verdad.

7. Aprender a tocar la guitarra española. Tengo el instrumento desde que era bien pequeñita y las ganas me sobran pero el tiempo me falta. Sería un verdadero lujo poder dedicarme a ello por un tiempo y así después, sentarme con ella a confesarle todo aquello que se esconde en mi, hacerlo saber a través de acordes que seguro que cuesta menos que contarlo oral.

8. Poder formar parte de algún equipo de fútbol, entrenar y llevar al día ese modo opcional de vida, o bien, un deporte individual, pero que exista una disciplina, un compromiso, una serie de valores que me hagan mejorar.

9. Me he pasado un sueño… como en C-LM tenemos 9 competencias en la docencia, que me dejen compensar con un sueño más… Seguir soñando despierta, día a día, que la ilusión y la sonrisa no la pierda pase lo que pase.

Dejo a libre elección que todos aquellos que lo quieran hacer lo hagan. No obstante, nomino a Maktub, Púrpura y Littlebell.

San Valentín

San Valentín... tal cual lo pintan parece tener de todo menos de santo. Aún recuerdo la historia que me contaron hace muchos años en el cole explicando el origen de esta celebración y creo recordar que solo era un sacerdote que casaba a soldados con sus amantes ya que estaba mal visto que lo hicieran por eso de no rendir luego en la guerra... y el pobrecito fue haciendo felices a miles de parejas y murió por amor, mártir de sus actos. Y digo yo, ¿qué es lo que realmente molesta a la sociedad? ¿Tener un día de obligado "cumplimiento" o de tener un detalle con tu pareja o con esa persona a la que amas? Que pasa, ¿no merece el amor tener su día exclusivo? ¿Porqué todos pensamos en el amor desde la perspectiva de una pareja? ¿Envidia? ¿Ataque personal? No lo entiendo. Si el amor es el sentimiento más universal, el que todo lo ocupa y todo lo puede, ¿donde está el problema? ¿Quién dice que se tenga que comprar algo? ¿Por qué no hacer o decir? A mi me sigue pareciendo bien que se celebre este día de amor o amistad, así quizás los más despistados/as logren dibujar más de una sonrisa y hagan entender que lo bonito de dar y recibir es ante todo lo primero. Yo por mi parte seguiré pensando que es mejor dibujarlas cada día y con los pequeños detalles pintando el cielo de mil colores...

Enero

Nunca hemos sido muy de ver la tv. en casa, ahora no es más. Es un poco desesperante encenderla y solo escuchar miserias de esta sociedad o ver personas miserables que no tienen nada que hacer en sus vidas que vagabundear de un plató a otro. Sí es cierto, que Telecinco desde hace diez años tomó una iniciativa que apoyé y sigo apoyando, de las pocas que se siguen manteniendo en los medios de comunicación. Creo que es importante el apoyo de la audiencia y que ya que nos deben todo, nos merecemos ese compromiso de información sobre dicha causa.

En este primer mes de enero, la causa se centra en prevenir el cáncer de mama, asi que si estás interesado/a, espero que sí, en prevenir o que los que quieres lo hagan, dedica un minuto de tu tiempo a informarte, a transmitir, a hacer llegar lo importante a los demás, entra aquí.

Os recomiendo la canción compuesta por Marta Sanchez y Malú, que dan voz a esta causa tan necesaria en actualidad, y ya sabes si puedes, compra Ausonia y colabora con la AECC.

Demasiado Tarde

Y sigo preguntándome aunque trataré de dejarlo de hacer porque hay preguntas que no tienen respuesta ya que nadie las contesta. ¿En qué momento se deja de querer? ¿Por qué conceptos se es capaz de dejar los sentimientos que se dicen tener a un lado? ¿Qué razón es tan fuerte como para poder con las ganas de luchar por quien se quiere? Quizás haya ido muy lejos, quizás solo nos debieramos quedar en ¿realmente se quiere? Yo sé mis respuestas, siempre las he tenido claras. Siempre he luchado hasta no poder más y esta vez no ha sido menos, ha sido incluso más. Sin embargo, no sé las suyas y no entiendo nada. Nadie me explica y sola no puedo comprender ese lo que quizás sea, asi que me quedo en la indiferencia de los desconocidos, de dos personas que se hablan como si nunca nada hubieran tenido. Es un absurdo, ¿verdad? Que mundo más surrealista, que te acabes encontrando lo que menos esperaste. Al menos no me quedo con la duda pese a que si luché me encontré con la pared, si lloré y tomé decisiones esperando demostraciones me encontré con el más triste de los silencios. Si espero me desesperaré. No me queda nada que hacer, la decisión está tomada porque así lo han querido. Dicen que si amas algo has de dejarlo libre para que regrese a ti si tuyo es. En mi caso no ha sido así, se fue, voló sin mirar atrás.